El ministro de Trabajo y precandidato a legislador porteño por el Frente para la Victoria (FpV), Carlos Tomada, dijo hoy que votará a Mariano Recalde para Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires al tiempo que valoró las candidaturas de Gabriela Cerruti y Gustavo López al considerarlos «dos cuadros políticos de primer nivel».
«Lo voy a votar a Recalde pero tengo que decir que Gabriela Cerruti y Gustavo López son dos cuadros políticos de primer nivel, dos referentes de la Ciudad y me enorgullece que me hayan elegido como referente para encabezar la lista a legisladores», manifestó Carlos Tomada.
Tomada agregó, en declaraciones a FM Nacional Rock, que «el aporte de las PASO en el fortalecimiento de la democracia de nuestro país va a ser recordado como el gran avance de estos 32 años de democracia. En las oportunidades en que las PASO se han utilizado, ha servido para que los candidatos sea elegidos por el voto y sustituyamos a tanta encuesta manipulada y direccionada, por una especie de encuesta más real».
«Celebro que esté vigente este procedimiento. Va a ser una excelente oportunidad para mostrar este frente amplio y plural, que da cuenta de toda la tradición del campo popular en la Argentina», manifestó el ministro de Trabajo.
Por otra parte, resaltó que su visión «crítica» con la gestión de Mauricio Macri «no supone un afán derogador como tienen algunos a nivel nacional, con un absoluto desprecio del avance del proyecto nacional y popular que es en beneficio de millones de argentinos».
«Planteamos la necesidad de introducir una mirada diferente en la Ciudad, más inclusiva, más planificada» porque la actual «parece estar hecha a las trompadas«.
Consultado sobre las declaraciones de la precandidata a jefa de Gobierno porteño por el PRO, Gabriela Michetti, respecto de los manteros, a quienes pidió que «no» la voten, Tomada revalorizó la importancia de la «inclusión» así como el «empleo registrado».
«El trabajo no registrado en la Argentina desde la dictadura y las distintas opciones de políticas económicas de los últimos 30 años lo único que hizo fue crecer todos los años un poco. Llegamos a tener el 50 por ciento del trabajo no registrado y en ese tiempo ni siquiera se hablaba. A los 90 días de haber asumido Néstor Kirchner lanzó el programa al combate del trabajo no registrado y el trabajo no registrado cayó 17%, algo inédito para la Argentina.Después sancionamos tres leyes: para las empleadas de casas particulares, trabajadores rurales y contra el fraude laboral», apuntó.
También, indicó que «nadie puede decir que no fue un punto de inflexión en el combate contra el trabajo no registrado. Para nosotros es un flagelo que combatimos y estamos a la cabeza de esta pelea». «Se hable de manteros, trapitos, limpiavidrios, hay que pasar a esquemas más formales donde haya organizaciones y cooperativas que formalicen a esos trabajadores. El Gobierno porteño tiene que tener una política activa para regularizar a los manteros. Será cuestión de buscarle lugares para que puedan trabajar respetando el espacio público», finalizó Tomada.
