Rubinstein rechazó la cesárea a la niña de 11 años: «Esto no debió haber ocurrido nunca»

El secretario de Salud de la Nación Adolfo Rubinstein se refirió al caso de la niña de 11 años en Tucumán que quedó embarazada producto de una violación y fue sometida en el día de ayer a una cesárea casi de urgencia: «Esto no debe pasar. No hay muchas palabras para definirlo más que es una situación terrible, un horror», aseguró.

Pese a haber sido víctima deo una violación y de que su embarazo era de «alto riesgo obstétrico», la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) -contemplada en el Código Penal desde 1921 para estos casos y ratificada por el fallo FAL de la Corte en 2012- se dilató un mes y debió ser sometida a una microcesárea en la que nació una beba con muy bajas chances de sobrevivir sin secuelas. «Escuché a los médicos que interrumpieron el embarazo en Tucumán y casi me pongo a llorar», aseguró el funcionario al respecto.

En diálogo con Radio La Red, Rubinstein opinó que este tipo de casos «no se debe judicializar y se debe asegurar la privacidad y la confidencialidad para que no tengan estos casos la repercusión mediática y social que están teniendo». En ese sentido agregó: «No hay absolutamente ninguna duda de que esta chiquita está comprendida dentro de todas las causales de la interrupción legal del embarazo (ILE)».

Al ser consultado sobre el accionar de el gobernador de Tucumán, Juan Manzur y la ministra de salud Rossana Chahla y el secretario Gustavo Vigliocco, Rubinstein señaló que decidir si la menor accede o no a un aborto «no es una competencia que tiene que ver con la secretaría de salud». «Nosotros tenemos que asegurar que se cumpla la ley», señaló.

Sobre los médicos que se negaron a participar dijo que «la objeción de conciencia es absolutamente atendible», pero, aclaró: «Lo que no puede ocurrir es que en una institución pública no haya ningún profesional que pueda realizar una práctica que además está autorizada por la ley».