El Papa Francisco repudió la represión: «En vez de pagar justicia social, pagó el gas pimienta»

El Sumo Pontífice reivindicó el derecho al reclamo y criticó la acumulación de riquezas sin límites.

 

El Papa Francisco disertó en un evento que conmemora los diez años del primer encuentro de los Movimientos Populares en el Vaticano. En ese marco, el líder espiritual cuestionó la represión en la protesta por el veto a la movilidad jubilatoria.

 

«Me hicieron ver una represión, hace una semana o un poco menos. Obreros, gente que pedía por sus derechos en la calle. Y la Policía la rechazaba con una cosa que es lo más caro que hay, ese gas pimienta de primera calidad», manifestó el Sumo Pontífice.

 

«Y no tenían derecho a reclamar lo suyo, porque eran revoltosos, comunistas, no, no. El Gobierno se puso firme y en vez de pagar la justicia social pagó el gas pimienta, le convenía. Ténganlo en cuenta eso», remarcó.

 

El Papa se mostró preocupado por la situación social: «Que nadie quede tirado, por favor. Hay tantos tirados por las calles, tanta gente que no tiene que comer, tanta gente que está pidiendo algo, que perdió la casa, que perdió el trabajo. Es gente que no tuvo capacidad de ir adelante».

 

Además, criticó la acumulación de riquezas sin límites. «La competencia ciega por tener más y más dinero no es una fuerza creativa, sino una actitud enfermiza y un camino a la perdición. Esa conducta irresponsable, inmoral e irracional está destruyendo la creación y dividiendo a los pueblos», afirmó.

 

En ese sentido, el líder espiritual señaló que «los frutos de la prosperidad económica no se reparten bien». «Esta es una realidad evidente que, si no se modifica, va a engendrar peligros cada vez mayores. Si no hay políticas, buenas políticas, políticas racionales y equitativas que afiancen la justicia social para que todos tengan tierra, techo, trabajo, un salario justo y los derechos sociales adecuados, la lógica del descarte material y el descarte humano se va a extender, dejando a su paso violencia y desolación», advirtió.

 

«Lamentablemente, muchas veces son precisamente los más ricos los que se oponen a la realización de la justicia social o la ecología integral por pura avaricia. Disfrazan esta avaricia con ideología, pero es la vieja y conocida avaricia. Entonces, presionan a los gobiernos para que sostengan malas políticas que los favorecen económicamente», enfatizó.

 

En el evento, asistieron dirigentes como Juan Grabois, Alejandro Gramajo (Unión de Trabajadores de la Economía Popular), Xaro Castelló (España) y Joao Pedro Stedile (Brasil).