Enrique Meyer destacó el impacto de esa «pollítica de Estado».
El ministro de Turismo de la Nación, Enrique Meyer salió al cruce de las declaraciones del candidato presidencial de la alianza Cambiemos, Mauricio Macri, y consideró que el ordenamiento de feriados iniciado en 2010 “es un potente redistribuidor de los recursos económicos desde las grandes ciudades hacia las economías regionales, genera empleo, inclusión y permite revalorizar nuestra identidad nacional”.
De esta manera, el titular de la cartera de Turismo salió en respuesta de las declaraciones de Mauricio Macri, quien opinó que «el tema de los feriados no fue bueno para el país» y anticipó que en caso de resultar electo en el balotaje «iremos viendo lo que vamos a hacer» al respecto.
En este sentido, Meyer consideró que actualmente el turismo es “política de Estado”, al tiempo que afirmó que esa actividad “es un potente redistribuidor de los recursos económicos desde las grandes ciudades hacia las economías regionales, genera empleo, inclusión y permite revalorizar nuestra identidad nacional”.
Entre 2003 y 2014, el turismo interno creció un 64%, dominado principalmente por el movimiento interno que expresa que 9 de cada 10 viajes que realizan los argentinos, se hacen dentro del país. Meyer indicó que en los últimos años “una serie de políticas, entre las que se destacan la Ley Nacional de Turismo, la recuperación de la aerolínea de bandera y el ordenamiento de feriados, permitieron que el turismo se afiance como uno de los sectores económicos más importantes de nuestro país”.
En este sentido, destacó que la actividad “ha generando más de 1.1 millón de puestos de trabajo, lo que representa el 5,4% del empleo total de argentina” y precisó que desde el decreto que dictó el Ordenamiento de Feriados, en 2010, “la llegada de turistas a los destinos nacionales durante los feriados se incrementó en un 189%”.
“Sólo en 2014 11.7 millones de visitantes se movilizaron durante los fines de semana largo del año” aseguró Meyer, quien también resaltó la “redistribución equilibrada y sostenida del gasto turístico en todo el país”, que hace que del gasto total del turismo nacional, «el 95% se distribuya entre todas las provincias argentinas”.
“Además de ordenar de manera eficiente los feriados, la norma restableció los feriados de Carnaval (suspendidos por la dictadura) y creó el feriado del 20 de noviembre con el objetivo de reivindicar la soberanía nacional; de este modo el turismo también aporta a la identidad y la soberanía de un pueblo sobre su territorio y su cultura”.
Meyer finalizó explicando que “hoy el turismo es Política de Estado, y el ordenamiento de Feriados es sólo un eslabón más dentro de una cadena de acciones que permiten alcanzar múltiples efectos positivos: empleos sustentables, dinamización de las economías regionales, distribución territorial de los beneficios; y lo más importante: un crecimiento federal, equilibrado e inclusivo de todos los habitantes argentinos”.