Junto a Uruguay, es el país con menor cantidad de pobres e indigentes, y con el mayor nivel de igualdad tomando en cuenta la redistribución de la riqueza, concluyeron dos informes distintos, uno del BID y otro de la ONU.
Argentina y Uruguay son los países de América Latina con menor cantidad de pobres e indigentes, y con el mayor nivel de igualdad tomando en cuenta la redistribución de la riqueza, concluyeron dos informes distintos, uno del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y otra de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Además, destacaron que Argentina es el país de la región que más redujo su cantidad de pobres e indigentes en la última década, haciendo que más 12 de millones de argentinos dejen esa condición; y también fue el que más aumentó sus clases media y alta, incorporando 15 millones de ciudadanos a la primera y un millón a la segunda.
De acuerdo con el BID; la pobreza en Argentina alcanza a 4,7% de su población; y la indigencia, a 1,4%, con datos tomados hasta 2013.
En pobreza le siguen Chile, con 7,8% y Uruguay, con 11,5%; en tanto que en indigencia, los uruguayos ostentan el indicador más bajo, con 0,5%; la Argentina se ubica segunda y el país trasandino tercero, con 2,5%.
Por su parte, Brasil tiene 15,1% de pobres y 5,5% de indigentes; Paraguay, 24% y 10,2%; Colombia, 30,6% y 9,1%;. y Venezuela, 31,8% y 8,8%.
De esta manera, la Argentina redujo en un 92% su indicador de pobreza de 2002, que había sido de 57,5%; y bajó en 94% su indigencia, que llegó a 24,7% ese mismo año.
Aun si se toman otras mediciones realizadas por el BID, en base a paridad de poder adquisitivo y empleando datos del Banco Mundial, la Argentina registra 10,8% de pobreza, ubicándose entre los tres países con menores indicadores de este tipo, detrás de Uruguay, con 7,1% y Chile, con 7,5%.
En cuanto a la indigencia, la misma medición alternativa del BID, ubica a la Argentina nuevamente tercera, con 4,2%, en tanto que Uruguay está segundo, con 2,5% y Chile primero, con 2,3%.
En estos casos, Brasil registra 20,4% de pobres y 10,8% de indigentes; Paraguay, 20,5% y 8,1%; Venezuela, 29,4% y 13,4%; y Colombia, 30,8% y 15,3%.
El Banco también comparó la distribución del ingreso en la región, con cifras a 2013, a través del coeficiente de Gini, donde 0 indica la mayor igualdad y 1 la más alta desigualdad, y estableció que Argentina, con 0,420, es el tercer país más igualitario, detrás de Venezuela, con 0,398; y Uruguay, con 0,384.
En este rubro Chile, con 0,531, se ubicó entre los tres países más desiguales de la región, solo superado por Colombia, con 0,539; y Honduras, con 0,553.
En la misma materia, Brasil tiene un coeficiente de 0,527; Ecuador, 0,485; Paraguay, 0,478; y Perú, 0,447.
Esta baja en la pobreza y la indigencia de Argentina en la última década, y su ubicación entre las tres naciones con menor cantidad de pobres e indigentes, también la refleja la ONU, en sus bases de datos.
Allí da cuenta que Argentina en 2012 alcanzó un nivel de 10% de pobreza, del cual 6% era indigencia; lo cual posicionó al país en segundo lugar, junto con Chile, ambos detrás de Uruguay.
En el caso de pobreza, Argentina y Chile registran 10% y Uruguay 7%; pero si se toma la indigencia, los charrúas mantienen el indicador más bajo, con 5%, los argentinos se ubican segundos con 6%; y los chilenos terceros, con 7%.
Nuevamente Argentina fue el país de la región que más fuertemente redujo su pobreza, con 89%, haciendo en la última década que 12 millones de argentinos dejen de ser pobres.
Esta contracción de la pobreza, según la ONU, fue consecuencia de un crecimiento de la clase media de 183% entre 2002 y 2012, incorporando a 15 millones de argentinos a ese estrato social, y además incrementando su clase alta en un 208%, con el agregado de casi un millón de nuevos ricos.
En tanto, Brasil registró una pobreza de 23%, de la cual 11% es indigencia; Venezuela, 28%, con 16% de pobres extremos; Colombia, 31%, con 15% de indigentes; y Paraguay, 32%, con 14% de pobreza extrema.