Además, la unificación del sistema cambiario seguirá poniendo frenos a la cantidad de moneda extranjera que se podrá adquirir.
El plan económico de Mauricio Macri, el presidente electo, pretende mantener el cepo cambiario a aquellos que no justifiquen sus ingresos. De esta manera, la eliminación de las restricciones para adquirir dólares mantendrá la limitación de justificar ingresos en pesos, según consignó el diario Ámbito Financiero. Además, la unificación del sistema cambiario seguirá poniendo frenos a la cantidad de moneda extranjera que se podrá adquirir.
Así, el equipo económico de Cambiemos buscará evitar que se financie una fuga de divisas sin justificar con las reservas que su puedan recuperar. De acuerdo a la opinión de Alfonso Prat Gay, Pedro Lacoste y el resto de los funcionarios que ocuparán el Ministerio de Hacienda y Finanzas, los datos de la economía real actual hablan de un promedio de entre un 30% y un 40% sin registrar, señaló el matutino.
En los hechos, la restricción implicaría volver al cepo primario, instalado en septiembre y al octubre de 2010. En octubre de 2011 comenzó a aplicarse, a partir de la Comunicación 5239 del Banco Central, el régimen de Consultas de Operaciones Cambiarias, por el cual cada operación necesitaba una comunicación ante la AFIP con la cual el organismo otorgaba un permiso primario para cada compra de divisas, pero no afectó el ritmo de demanda de la divisa extranjera. Sí produjo que aumentara ya sustancialmente la demanda de dólares «blue», y que el paralelo empezara a despegarse del valor oficial, pero en un porcentaje que no superaba el 10%.
Todo indicaría que a este punto que quiere llegar el gobierno de Mauricio Macri. Sin embargo, no será con la regulación del BCRA de 2011, sino con otro mecanismo similar que no implique para el ahorrista la percepción de un sistema policial o controlante.