El presidente Mauricio Macri celebró hoy la captura de los tres prófugos por el triple crimen de General Rodríguez, pero admitió que «estamos muy lejos del profesionalismo para encarar estos temas».
En una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, el jefe de Estado dijo que hay más de mil prófugos, a los que durante el kirchnerismo «ni los buscaron», no obstante advirtió que el Gobierno va a «empezar a trabajar en un área específica para buscar a cada uno de ellos».
«Estamos muy lejos del profesionalismo que tenemos que tener para encarar estos temas», señaló el mandatario sobre la fuga de los hermanos Cristian y Martín Lanatta y Víctor Schillaci, pero celebró que «habiendo tomado la decisión de que íbamos a encontrar a los prófugos, a pesar de las carencias, lo logramos».
Sobre las fuerzas de seguridad indicó que «tienen una historia, por inacción o complicidad, que han sido penetradas por parte de las mafias», aunque destacó que a pesar de «los errores», se logró recapturar a los prófugos del triple crimen de General Rodríguez. «Hay una mayoría sana (de las fuerzas de seguridad) que apoyó en los últimos días para esta captura, que parecía imposible», aseveró Macri.
Durante una conferencia de prensa en la Casa Rosada, el jefe de Estado expresó: «No arrancamos de cero, se arrancó con fuerzas de seguridad que tiene una historia, por inacción o complicidad, que han sido penetradas por parte de estas mafias».
Al ser consultado sobre los despidos de estatales, Macri sostuvo encontró «un enorme vaciamiento del Estado» y advirtió que «el Estado no es del partido político que ganó la elección». «El Estado tiene que estar al servicio de todos, porque no es del partido político que ganó la elección», señaló.
El mandatario sostuvo además que al asumir encontraron «un Estado puesto al servicio de la militancia política», y aseguró que buscarán «construir un Estado como el de la ciudad de Buenos Aires, apostando a la carrera pública».
Por último, respondió sobre la negociación sobre los fondos buitres y dijo que buscará «un acuerdo razonable», en vísperas de una nueva negociación con representantes de los fondos buitre que comenzará mañana en la ciudad de Nueva York. «Queremos dejar de ser un país que ha sido catalogado como incumplidor», sentenció el jefe de Estado en conferencia de prensa en la Casa de Gobierno.
