Una nueva polémica flota alrededor del Presidente de la Nación, Mauricio Macri, y esta vez proviene desde Estados Unidos. Es que lo premiarán en New York por “su dedicación incansable y desinteresada con su país”.
No parece casual que la novedad llega tras el «apoyo» del jefe de Estado norteamericano, Donald Trump, a su par argentino y en plena negociación con el FMI. Justamente se trata de un galarón que ya recibió la titular del organismo internacional, Christe Lagarde.
El premio que recibiría por parte de Atlantic Council ya fue entregado en otras oportunidades a los ex presidentes estadounidense Bill Clinton y George Bush; al premier canadiense, Justin Trudeau; a la primera ministra de Noruega, Erna Solberg, la directora del FMI, Christine Lagarde, y al cantante y activista Bono, entre otros.
“En este período de rápido cambio global e incertidumbre, estos premios envían un mensaje particular con respecto a la marca de liderazgo consistente, de principios y decidido que nuestros tiempos requieren“, dijo argumentó Frederick Kempe, presidente y director ejecutivo de Atlantic Council.
La premiación generó ruido en Argentina, en momentos en que nuestro país atraviesa una de los peores crisis económicas de los últimos 30 años.
Kempe insistió en que al jefe de Estado argentino «se le destaca a incansable e intransigente dedicación a su país y su pueblo a través de su enfoque pragmático de política, compromiso con la reforma económica y revitalización, y la renovación de las relaciones con socios internacionales ejemplificada por la actual presidencia argentina del G20”.
