El gobierno griego presentó al Parlamento, que debe votarlo este miércoles, un proyecto de ley sobre la reforma del código civil y la directiva europea de «saneamiento de bancos» incluidos en la extensa lista de exigencias integradas en el segundo paquete de reformas acordadas entre Atenas y el Eurogrupo.
De acuerdo al procedimiento de urgencia con que será tramitado este proyecto de ley, está previsto que mañana se analice en comisiones que se extenderán toda la jornada y que el pleno se inicie por la noche para debatir y votar las medidas.
La reforma del código civil provocó malestar entre jueces y abogados, que criticaron la «falta de información sobre los cambios que prevé», según informó la agencia de noticias EFE.
Fuentes gubernamentales aseguraron que el proyecto no incluye la eliminación de las exenciones impositivas para los agricultores ni la restricción de las jubilaciones anticipadas.
En un principio se habló de que podían estar entre las medidas que se votarán mañana, aunque no figuran en la lista de requisitos previos que se estipuló que debían estar legislados después del 22 de julio, de acuerdo con el pacto alcanzado entre el Gobierno y la eurozona hace ocho días.
Estas dos cuestiones podrán ser votadas junto a otras medidas en una sesión posterior que podría celebrarse a principios de agosto, aseguraron las fuentes.
El eventual incremento (del 13% al 26%) de la tasación a los ingresos de los agricultores había provocado la reacción de varios diputados de la mayoría gubernamental y de los partidos de la oposición, que tienen entre los agricultores un importante fuente de votos.
El texto sujeto a escrutinio mañana también incorpora a la legislación griega la directiva europea BRRD (Bank Recovery and Resolution Directive), que se refiere al saneamiento de los bancos y garantiza los depósitos bancarios hasta 100.000 euros en caso de quita.
El BRRD es una resolución incluida en la legislación comunitaria que rige cuando las autoridades detectan la existencia de fallas en algún sistema bancario y determinan que la intervención del sector privado no asegura la resolución del problema «en un breve espacio de tiempo» y los procedimientos ordinarios de insolvencia pueden causar inestabilidad financiera.
Según la Comisión Europea, la BRRD «proporciona a las autoridades herramientas más completas y eficaces para hacer frente a los bancos en quiebra en el ámbito nacional, así como para hacer frente a los fracasos bancarios transfronterizos».
En la sesión de mañana el Gobierno de Alexis Tsipras afronta una nueva prueba de unidad, después de que 39 diputados de Syriza no respaldaron el acuerdo en la votación del pasado miércoles, lo que condujo a una reestructuración del Ejecutivo para sustituir a los miembros díscolos.
La aprobación de estas medidas es una condición para que Grecia y los acreedores puedan iniciar las negociaciones sobre el tercer programa de rescate.