Manuel Valls, el primer ministro francés, dijo hoy que su gobierno va a adoptar medidas excepcionales en su lucha contra el extremismo luego de los atentados islamitas de la semana anterior. Remarcaron que no serán “de excepción” que cuestionen al Estado de derecho.
«Una situación excepcional debe ser seguida de medidas excepcionales, pero digo, con la misma fuerza, que nunca de medidas de excepción que contravengan el principio del derecho y de los valores«, dijo Valls en la Asamblea Nacional en una sesión de homenaje a las 17 víctimas de los atentados.
En este marco indicó que pidió a los representantes de Interior, Justicia y Defensa que en los próximos ocho días le entreguen sus respectivas propuestas, e instó a actuar con determinación y sangre fría, pero sin precipitación, informó la agencia de noticias EFE.
Por otro lado apuntó en la necesidad de poner en marcha un nuevo “fichero” de personas condenadas por extremismo y que de aquí fin de año se ampliará al resto del país un programa piloto que comenzará a aplicarse esta semana en dos prisiones de la región parisina, que agrupa y aísla del resto de reclusos en la misma ala de una prisión a detenidos radicalizados.
Por último apunto: “Francia está en guerra contra el terrorismo, los yihadistas, el radicalismo, pero no contra una religión”.