Australia lanzó un alerta por posibles atentados yihadistas en su territorio

La actual alerta de «probable» responde a que existe información de inteligencia «creíble» que indica que «un grupo de personas tienen tanto la intención como la capacidad de realizar un acto terrorista en Australia», según el portal de seguridad nacional.

El nuevo sistema de alertas por amenazas implementado desde hoy tiene como nivel máximo «cierto», en el que un ataque es inminente, y le preceden «esperado», «probable», «posible» y «no esperado».

La escala también incluirá un «comunicado de alerta al público» para explicar los detalles de las amenazas y desgrana los posibles objetivos y los medios que puedan utilizarse para los ataques.

«Nuestra evaluación de la amenaza que afrontamos y nuestra determinación de hacer frente a la amenaza que afronte Australia no ha cambiado ni un ápice«, dijo el fiscal general, George Brandis, en rueda de prensa en Canberra.

El director de la Organización Australiana de Seguridad e Inteligencia (ASIO), Duncan Lewis, recalcó en rueda de prensa que «existen diferencias enormes entre la clase de actos terroristas que pueden ocurrir, un lobo solitario como ya hemos visto en este país o como los de París y Líbano».

En diciembre de 2014, el iraní Haron Monis secuestró a más de una decena de personas dentro de una cafetería en pleno corazón financiero de Sídney, y tras unas 17 horas de la toma, la intervención policial se saldó con la muerte de dos rehenes y el secuestrador.

En octubre de este año, un adolescente asesinó a tiros a un empleado de la Policía a las afueras de una comisaría del oeste de Sídney, antes de ser abatido por las autoridades.

Australia elevó a alta su alerta terrorista en septiembre de 2014 y desde entonces reforzó la seguridad y aprobó una serie de leyes antiterroristas para evitar que se produzcan atentados en su suelo, que ha sido escenario de ataques aislados.