La precandidata presidencial de la Coalición Cívica-ARI en Cambiemos cerró hoy su campaña de cara a las PASO con un acto en un salón de Palermo, en el que denunció que “el sistema de mafias y de poder en Argentina” quiere verla “sola”.
“El sistema de mafias y de poder en Argentina quiere verme sola y la verdad es que millones me acompañan”, expresó Elisa “Lilita” Carrió y advirtió que el esfuerzo de sus detractores “no tiene que ver con una elección, sino con una voz”, en alusión a que hay un intento por silenciarla.
El acto, que se desarrolló en el salón Palais Rouge de Palermo y comenzó algo más de una hora más tarde de lo previsto, dejó ver un público exacerbadamente eufórico, que aplaudió de pie a Carrió, a su compañero de fórmula Héctor “Toty” Flores y a los primeros postulantes a legisladores Hernán Reyes y Marcela Campagnoli y a la postulante al Parlasur Mariana Zuvic.
En un extenso discurso que recibió enérgicos aplausos y silbatinas a los funcionarios nacionales mencionados, Carrió dio un contundente respaldo a su candidato a vice -cuyo yerno fue detenido en las últimas horas acusado de ser dueño de un laboratorio de producción de drogas-, se diferenció y cuestionó duramente a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, al igual que a sus ex aliados Adrián Pérez y Margarita Stolbizer, aunque a éstos últimos sin nombrarlos.
Además, pidió “derechos humanos para todos” y arrojó un manto de duda sobre quienes combatieron contra la última dictadura militar.
“No se crean que eran todos idealistas; en el fondo lo que querían era ser ricos, no revolucionarios; hubo muchos amigos que sí fueron idealistas, pero éstos, los que están vivos, no me engañan”, planteó.
Carrió destinó críticas a quienes se definen “progresistas” y sugirió “por qué no les preguntan por qué votaron otorgarle plenos poderes a (Domingo) Cavallo o garantizaron la impunidad a las coimas en el Senado”.
En la misma línea, se quejó de quienes en la CC-ARI la “corrían por izquierda y ahora están con (Sergio) Massa”, en alusión a Adrián Pérez, ex compañero de fórmula presidencial de Carrió.
Con su habitual estilo autorreferencial, Carrió se definió como la candidata “de mayor cultura y educación del
ámbito político y académico de Argentina”, parafraseó a Juan Perón y aseguró que “la verdad es la única realidad” y que “quien dice la verdad está bendecido por Dios”.
Poco antes, Flores había despertado la euforia generalizada cuando le dirigió algunas palabras a los “capos del narcotráfico” y aseguró: “Nosotros con Lilita no les tenemos miedo; no se metan con la familia porque eso es de cobardes”.
El acto mostró un ecléctico público, que hizo flamear dos banderines de Cambiemos y que durante la larga espera inicial se sacó fotos con los candidatos y dedicó a “Toty” Flores efusivas muestras de apoyo, con palmadas y abrazos, mientras una pantalla gigante mostraba las publicidades televisivas de la fórmula.
Luego del ingreso de Carrió, enfundada en un saco negro de raso y vestido blanco y negro con brillos, Reyes fue el primero de los candidatos en tomar el micrófono y, en su discurso, reivindicó el gobierno de Raúl Alfonsín y aseguró que su espacio “bajará los impuestos”.
Después, Campagnoli dijo que quienes se encolumnaron detrás de Carrió tienen “propuestas, convicción, decisión y Dios” y exhortó a escuchar “la voz republicana que llama”.
En tercer lugar, Zuvic declaró que el programa de Jorge Lanata “Periodismo para Todos encendió la luz en ese lugar tan oscuro durante tantos años” y advirtió que “no votar Parlasur es hacerle campaña a Milagro Sala“, lo que originó una sucesión de vítores y aplausos.