Así lo aseguraron desde la Unión Industrial Argentina al sostener que el daño causado por las políticas de Cambiemos demandará una década en reconstruirse y recuperar los niveles de crecimiento del 2012. «No se puede vivir con una devaluación del 30% de cada año y ese nivel de inflación», remarcó.
El presidente de la Unión Industrial Argentina, Miguel Acevedo, estimó que el daño causado por las políticas de Cambiemos al sector industrial demandará una década para poder reconstruirse y llegar a los niveles de crecimiento que presentaba en el año 2012. Además consideró que hay que reabrir paritarias y dar previsibilidad desde lo político.
«La última suba en la industria fue 2011. Desde ese año a hasta ahora tuvimos una destrucción del 15% de la industria. Para levantar al 3% anual vamos a demorar más de 10 años», señaló Acevedo en una entrevista con radio La Red tras el día conmemorativo de los industriales donde también estuvo el ministro Dante Sica.
Justamente coincidió con el ministro de Producción y Trabajo de Mauricio Macri en «se va a tener que reabrir las paritarias» ya que el «poder adquisitivo ha caído muchísimo». En esa línea, planteó que hubo «mucha destrucción de valor en la industria», aunque aseguró que el país «tiene potencial para recomponerse».
«Si empezamos a tener previsibilidad, con solamente decir no vamos a tener saltos de dólar. No se puede vivir con una devaluación del 30% de cada año y ese nivel de inflación», indicó el titular de la UIA. «El problema de la Argentina es que hay una desconfianza atroz. No solo la gente de afuera, sino también los argentinos», sostuvo.
En cuanto a las reuniones que han mantenido con diversos candidatos presidenciales contó que «acercamos diez puntos para el sector» y resaltó que «con que los políticos acuerden y cumplan dos o tres puntos, como respetar los contratos y combatir la inflación, cambiaría la situación argentina de hoy».
El nivel de desconfianza de los argentinos y de los actores internacionales según Acevedo generó que haya «más de un PBI que estamos financiando afuera» y que «representa la desaparición de unas 4.074 empresas industriales. Estamos ahogándonos en un charco», sentenció.